El plantón
Felipe Calderón es un peligro para México
El “peligro para México” fue el argumento barato y mentiroso que usaron los panistas en la campaña presidencial de 2006 para atacar a Andrés Manuel López Obrador. Ante la falta de propuestas y el nulo carisma del candidato de la derecha, Felipe Calderón, los “estrategas” contratados por el PAN no tuvieron mejor idea que recurrir a un fascismo vulgar y corriente para apelar a los sentimientos y temores más oscuros del mexicano. Todo en aras del poder. Como sabemos, la estrategia tuvo relativo éxito, porque si bien no les alcanzó para ganar las elecciones –por lo cual tuvieron que recurrir al fraude electoral-, sí dejaron a la sociedad mexicana dividida, polarizada, y sembraron en ella la peligrosa semilla del odio y la violencia.
Lejos de contribuir a curar esas heridas, Calderón se ha encargado de echarles sal cada que tiene oportunidad. Con su bien conocida soberbia y su carácter irascible, ha terminado no sólo por ganarse el repudio absoluto de quienes sabemos que es un traidor a la democracia que se robó las elecciones, sino que también ha alienado a muchos que antes lo apoyaban por creer de buena fe en sus promesas.
Pero lo anterior es meramente anecdótico. A fin de cuentas, que Calderón vaya por la vida con su insoportable actitud de petulancia, sus arranques de cólera, sus supuestos problemas con la bebida, sus aires de grandeza y sus poses dizque de estadista que lo hacen ver ridículo, es problema de él. Lo verdaderamente grave es lo que, desde la posición que usurpa, le ha hecho al país.
A dos años del golpe de estado electoral que impuso a Calderón en la presidencia de la República, todos los vaticinios apocalípticos que el PAN vociferaba que ocurrirían si llegaba el Peje a la presidencia, se han cumplido con SU candidato en el poder. Absolutamente todos. Inseguridad, violencia, el crimen desatado, desempleo creciente, inflación galopante, devaluación, crisis…
¿No era eso lo que nos dijeron que pasaría si el Peje llegaba a la presidencia? ¿No era todo eso contra lo que nos advertían Oscar Mario Beteta, Carlos Mota, Sergio Sarmiento, Leo Zuckermann, Sánchez Susarrey, la gordita que da las finanzas en Radio Fórmula, y tantos y tantos “sesudísimos” opinólogos y levantacejas a sueldo?
Uno de los spots idiotas de la campaña sucia mostraba unos ladrillos que se caían mientras una voz nos advertía que eso sucedería si quedaba el Peje: “puedes perderlo todo”. Hoy, campañitas idiotas aparte, y con el país desmoronándose, habría que preguntarle a la gente quién era el verdadero peligro para México.
Tilichero: Así se la haya robado, Calderón juró servir a México desde la presidencia. No lo ha hecho. ¿Qué esperamos para correrlo a la chingada? Revocación del mandato, YA.
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