Ladillas - La Razon de la Republica
Ladillas
La Razón de la Republica
Por el Lic. Mefistófeles Satanás
En cuanto el imbecil y mocho de Iturbide asumió el titulo de “emperador” su gobierno empezó a hacer agua. México, destruido después de una guerra fraticida de once años, no podía sostener un gobierno con “brigadas de generales”, no generales de brigada. Eventualmente Santa Anna y los antiguos insurgentes se levantaron en armas contra Iturbide. Aunque Santa Anna se rebeló pidiendo que se instaurara una republica, luego el mismo admitió que “no sabia que chingaos era eso”.
Una vez caído Iturbide, los revolucionarios triunfantes se pusieron de acuerdo en que la republica mexicana fuera presidencialista, con un congreso, y un poder judicial. Y es que el modelo lo tenían al lado: los gringos. Inclusive, la constitución de 1824 fue fusil de la gringa. Los protoliberales –capitaneados por don Valentín Gómez Farias—creían que con solo importar el formato gringo los males de la republica serian erradicados.
Hubo voces que estaban en contra. Una particularmente elocuente fue la de Fray Servando Teresa de Mier. Y no habia manera de acusar a Fray Servando de ser traidor a la patria. Había sido exiliado a España por la inquisición, había luchado entre las fuerzas españolas contra la invasión napoleónica, y había acompañado a don Francisco Javier Mina cuando este vino a luchar por la independencia de México. Y Fray Servando se oponía a una republica presidencialista. Prefería que se hiciera una republica parlamentaria, al estilo europeo.
A grandes rasgos, cuando el premier o gobernante de una republica parlamentaria la caga gacho, la oposición puede pedir que se hagan elecciones. Primero se hace un voto en el congreso para determinar si “ya no hay confianza en el pendejo a cargo del gobierno”. Si no hay tal, se convoca a elecciones generales. Si a raíz de las elecciones el gobierno obtiene una minoría en el parlamento, entonces se le reemplaza por un nuevo gobierno. El nuevo primer ministro viene del partido que gana las elecciones.
O sea, si tuviéramos tal tipo de republica el gobierno del burro parado hubiera caído luego luego de que hubiera abierto su boca y dicho la primer pendejada. El enano hubiera caído tan solo por lo de Zongolica. No creo que ningún gobierno PRIANista duraria mas de tres meses (y tal vez ninguno del perdere).
Y dirán ustedes que en tal caso pareceríamos la quinta republica francesa, la que cambiaba de primer ministro cada fin de semana. Pos seria mucho honor: esa quinta republica derroto al kaiser y era una democracia cuando el resto de Europa se hundió en el fascismo. Le es menos dañino a la patria cambiar de gobierno a cada rato que tener que aguantar seis años de un pendejo.
Creo que es tiempo de que nos preguntemos porque chingaos tenemos una republica presidencialista donde se tiene que aguantar a un pendejo o un ladrón por seis años. Repito, tenemos esta porque era el modelo que conocían los protoliberales. F(ray Servando se opuso, si, pero al final tuvo que aceptar el voto mayoritario.) Pero del presidencialismo –y del modelo de republica que lo cobija—han venido todas las dictaduras y abusos que ha sufrido el México independiente. Es evidente que para eliminar este modelo necesitamos tener una nueva constitución. Doscientos años de aguantar pendejos ya son demasiados.
No hay comentarios:
Publicar un comentario